Análisis Ginger: Beyond the Crystal
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Análisis Ginger: Beyond the Crystal

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BadLand Games, a través de sus estudios de videojuegos independientes, nos proponen hoy una simpática aventura en tres dimensiones de las que gustan a todos los públicos, tanto al adulto como al infantil. Con una colorida puesta en escena nos llega a PC, PlayStation 4 y Xbox One el nuevo título de Drakhar Studio llamado Ginger: Beyond the Crystal, un juego de plataformas en el que tendremos que ponernos en la piel de Ginger para volver a recuperar los cristales del color a las villas que lo han perdido.

En la cinemática inicial se nos contará la historia de un pueblo protegido por una diosa como agradecimiento por las odrendas que le realizan cada año. Esta diosa, que tiene forma de piedra, concentraba su poder gracias a un misterioso cristal azul, hasta que un día un cristal rojo absorvió el poder de los azules y la diosa tuvo que crear a Ginger, un joven y simpático ser que tiene que devolver la magia de los cristales a los tres mundos que han perdido su poder. Después de esto tendremos que realizar un breve tutorial (que recomendamos) en el que se nos enseñará a usar las habilidades de nuestro protagonista, como la de saltar doble o pegar a los enemigos. Pero lo que aprenderemos en el tutorial no es lo único que podremos hacer mientras controlamos a Ginger, porque el estudio nos ha preparado un montón de sorpresas que podremos realizar con nuestro simpático personaje.

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Entrando ya ne materia, las ciudades de este colorido mundo han sido arrasadas por la falta de magia de los cristales azules. Por suerte en cada ciudad ha sobrevivido algún ciudadano que nos guiará hasta el cristal grande para que podamos liberar algún ciudadano, que a su vez nos dará alguna misión a realizar con la que poder ganar más cristales pequeños, objetos, habilidades para resolver ciertos puzles, mapas de las ciudades.... A pesar de su colorido y su apariencia, realizar todas las misiones y llegar a superar los 15 niveles no será tarea fácil. La mayoría de fases contienen otras subfases en las que podremos recoger más cristales y ganar objetos y bonus que nos permitan avanzar en la aventura del simpático protagonista azul. Durante la aventura encontraremos objetos escondidos tras una telaraña, y en la cabeza de Ginger saldrá un típico bocadillo de cómic que nos dirá cómo quitarla, como la de cambiarnos la ropa por la de música y tocar el banjo haciendo el típico ejercicio de memoria estilo "Simon Dice", pero con los botones del mando.

Mientras recorremos los mundos de Ginger vamos olfateando ese sabor nostálgico que tan buenos recuerdos nos han dado los títulos de anteriores plataformas en las que los juegos de plataformas en 3D eran los reyes de los circuitos de las consolas. Sí, es todo un homenaje a esos juegos clásicos por su forma innata de ser. Pero como todo buen plataformas, también tiene sus puntos débiles como el sistema de combate, que deja bastante que desear en cuanto al control del mismo se refiere, con unos enemigos bastante repetitivos y que en pocas ocasiones podremos evitar.

El apartado gráfico del título es bastante correcto, con muchos colores como hemos mencionado antes. Hay ciertos errores en cuanto a clipping, como quedarse debajo de un árbol y con la cámara, que no ayuda en nada en estos casos, puedes estar intentando salir de ahí durante unos segundos. La tasa de frames también se muestra inestable en algunas ocasiones, y es aquí dónde se nota que no está optimizado del todo para consola, pues entendemos también que Drakhar es un estudio bastante joven y aún tiene que mejorar en muchos aspectos. Los escenarios a pesar de ser coloridos suelen estar bastante vacíos y los personajes podrían contener algún tipo más de detalle; en cierto modo recuerda bastante a The Last Tinker, tanto por sus coloridos como por las mecánicas de juego bastante facilonas. Los tres mundos diferentes le dan un toque de variedad y hacen que no se nos hagan demasiado aburridas las mecánicas jugables.

Pero si por un punto destaca Ginger: Beyond the Crystal es en su apartado sonoro, no esperéis tampoco la música de un Final Fantasy, pero para la tipología de juego que es, cumple sobradamente con su cometido con melodías pegadizas y con unos efectos de sonido que se limitan a cumplir su cometido.

Conclusión

Ginger: Beyond the Crystal es un juego de corte infantil que derrocha simpatía y colorido allá por donde pasa, gracias a su puesta en escena divertida y musicalmente agradable. Su estilo de juego puede recordar a títulos como el inolvidable Crash Bandicoot (y tiene algún guiño a este tíulo y algún otro), aunque queda bastante lejos de las aventuras del mítico personaje naranja. Podemos recomendar este título sin miedo a equivocarnos a personas que quieran regalar un juego entretenido a niños, o simplemente a alguien que tenga ganas de jugar a un título de plataformas hecho en España con un sabor añejo. Su precio es de tan solo 19,99€ así que creemos que merece una oportunidad de compra.

Redactado por:

Subdirector y redactor senior en Areajugones. Aficionado al mundo de los videojuegos desde pequeño y amante de las consolas retro. Amante de Dragon Ball, Gears of War, jugador de PlayStation, Xbox y Nintendo, no tiene por qué ser en ese órden.